Los sellos cortafuego, también conocidos como sellos cortafuegos o sistemas de sellado resistente al fuego, son componentes cruciales de la seguridad pasiva contra incendios en la construcción. Su función principal es restaurar la integridad de los muros y forjados (pisos/techos) con clasificación de resistencia al fuego cuando estos han sido atravesados por instalaciones como tuberías, cables, bandejas portacables, conductos de ventilación o juntas de construcción.

Cuando se realiza una abertura en un muro o forjado cortafuego para permitir el paso de estas instalaciones, se crea un punto débil por donde el fuego, el humo y los gases tóxicos pueden propagarse rápidamente a otras áreas del edificio. Los sellos cortafuego están diseñados específicamente para cerrar y sellar estas aberturas, impidiendo el paso de las llamas y el humo durante un período de tiempo determinado, conocido como su clasificación de resistencia al fuego (por ejemplo, 1, 2 o 3 horas).